Entre clásico y moderno

En los trabajos realizados en la recuperación integral y puesta en valor de la construcción, necesarios para la concreción de este proyecto, se mantuvo el estilo clásico de la fachada original del frente. De esta manera, la casona permite contemplar sus molduras y su estilo antiguo. En un esfuerzo por mantener sus peculiaridades, el portón de hierro trabajado, las mamparas y los vitroux originarios, fueron conservados luego de arduos trabajos de restauración. Asimismo, las puertas con sus rajas y vidrios biselados permiten transportarse a una época, en donde este tipo de construcciones fueron características en el surgimiento de la ciudad.Ingresando por el acceso principal, se accede al salón. Con una relación lúdica deliberada entre un exterior original de la época de la construcción y un interior completamente ayornado, el salón experimenta una transformación hacia lo moderno. La utilización de vidrios amplios, los colores fuertes, con una gama que oscila entre el tiza, el rojo y el negro; mobiliarios rectos y oscuros, como son la barra de drink, la cabina del disc jockey, las sillas; se conjugan meticulosamente con los componentes antiguos, como es la araña de bronce con cristales tallados. Este espacio es coronado con la calidez que brinda al lugar los pisos de madera.

{smoothgallery folder=images/stories/revista74/arquitectura/arquitectura2}
La intervención realizada en los baños fue dirigida a permitir la convivencia de las molduras originales y porcenalatos claros con las maderas molduradas oscuras y los accesorios blancos. Asimismo, estos componentes se conjugan con la utilización de colores intensos en sus paredes de micro cemento. En busca de brindar un mayor servicio a sus clientes, el Astor Albana Salón Boutique cuenta con cuatro baños, uno para niños, otro exclusivo para personas con movilidad reducida, y dos para hombres y mujeres, respectivamente.
La cocina fue acondicionada con colores luminosos, en la gama de los blancos y en el centro de la misma fue provista una con isla para facilitar y optimizar el trabajo del servicio de catering.
En lo que respecta al espacio principal, el salón cuenta con zonas bien definidas, pero si perder la fluidez de desplazamiento de sus comensales como así tampoco la comunicación visual. En este sentido, es posible distinguir un sector de living, provisto de unos confortables sillones blancos, acordes a la decoración del lugar, con sus respectivos puf y mesa ratona.
El sector comedor articula el living y la pista de baile. El mismo, de una capacidad variable, cuenta con amplias mesas redondas lo que permite una optimización del espacio y una mayor comodidad a sus visitantes. Cuenta con un mobiliario que puede ser removido con facilidad, lo que le otorga al lugar la posibilidad de acondicionar el comedor según la cantidad de invitados.
El sector de la pista de baile presenta una novedad en lo que a salones de eventos sociales se refiere. Fue dotado con una iluminación de última generación en LEDS. Si bien la misma puede apreciarse a lo largo y a lo ancho del salón, la vedette se encuentra en la pista de baile, al ser equipada con quince cuadrantes de tachos de LEDS brindando una iluminación que puede ser apreciada no solo desde arriba, sino también desde los pies.
Este sector se comunica, mediante un gran plano vidriado, con el patio del lugar. El mismo cuenta con un deck amplio que se presenta para realización de diversas actividades. Asimismo, el patio fue provisto de una barra que comunica con el sector de la parrilla, para los amantes de las comidas a las brasas, como así también con la cocina principal.
El jardín cuenta con una cascada de vidrio, con un espejo de agua y con terrazas en piedra con distintas especies de plantas que le dan al lugar la unión con la naturaleza.
El Astor Albana Salón Boutique se presenta como un nuevo espacio en la ciudad que logra conjugar el estilo clásico con el moderno, acordes a las nuevas tendencias de Palermo Soho, y con un ambiente personalizado para hacer de un evento un encuentro único.