Museo y memorias culturales

Etimológicamente, la palabra museo remite a la mitología griega. Derivado del término Musas, las nueve deidades, hijas de la Memoria, que protegían las ciencias y las artes; el museo, concebido como “la casa de las musas”, se convirtió en un espacio de culto a las diosas que provocaban y concedían inspiración.

Con el correr de los años, los museos pasaron a ser edificaciones que preservaban y exhibían objetos artísticos y memorias culturales e históricas, e invitaban a los visitantes a recorrer sus salas y pasillos descubriendo el arte a su paso.
En Berazategui, en un antiguo edificio ubicado en el casco histórico de la ciudad, funciona uno de estos espacios que supo conservar y preservar el patrimonio cultural local: el Museo Histórico y Natural.
A partir de la recolección de piezas donadas por los vecinos, el 20 de junio de 1993 se inauguró este museo, que actualmente se encuentra ubicado en el Complejo Municipal San Francisco, luego de su traslado el 15 de abril de 1997.
La premisa principal de su creación fue la posibilidad de construir memorias colectivas de Berazategui y sus ciudadanos, cumpliendo funciones educativas, de investigación, conservación y difusión al servicio de la comunidad.

Ubicado en la calle 149 y 23 del casco histórico de la ciudad, el Museo Histórico y Natural funciona en una propiedad más que significativa tanto arquitectónica como históricamente (el almacén de ramos generales y vivienda de la familia Traverso). Un edificio tradicional y reconocido del barrio, testigo de la historia y el compromiso social de la comunidad de Berazategui.
El museo tiene como misión constituirse en un espacio de apropiación cultural comunitaria dando cuenta de la riqueza de su historia local y el capital patrimonial cultural y natural que posee. Su consigna es: “PERMITIDO: arrebatarle al olvido nuestro pasado; sentarse y contar historias; recordar seres queridos, emocionarse y compartir”.
Fotografías, objetos y recreaciones referidas a la diversidad y a la riqueza natural del partido de Berazategui, junto a muestras de fragmentos arqueológicos que evidencian la ocupación humana en la región protagonizan las salas del museo. El recorrido se complementa con documentos y herramientas representativas de la actividad productiva inicial, signada por el desarrollo de chacras, quintas y tambos para la explotación lechera, junto a objetos que dan cuenta de la significativa llegada del ferrocarril a la zona.
Una sala dedicada a Cristalerías Rigolleau, que provocó un determinante crecimiento urbanístico y comercial en Berazategui y espacios dedicados al arte en vidrio, realizados por artistas consagrados que dieron origen a la colección del Museo del Vidrio también pueden visitarse. Precisamente fue la impronta del vidrio en la comunidad y su reconocimiento como factor aglutinante de la identidad local, lo que ha determinado que Berazategui sea declarada “Capital Nacional del Vidrio”.
Así, el Museo Histórico y Natural es un espacio comunitario que refleja la identidad de la ciudad y sus pobladores, que reafirma sus 400 años de historia y su riqueza patrimonial. Un lugar de creación y conservación de memorias colecticas y culturales acercándonos al Berazategui de ayer y de hoy.~

 

Fuente: Museos Municipales de Berazategui
www.culturaberazategui.gov.ar
Fotos: Victoria Eugenia Fiore y Mónica Salgado