Una vivienda que rompe con lo tradicional en Calera, Córdoba, donde el hormigón negro y la madera de kiri se fusionan con las vistas panorámicas.
Depurada funcionalidad
**una propuesta a partir de una idea de intimidad y la búsqueda de espacios,enmarcados para el descanso, la contemplación de la naturaleza y el encuentro.
Casas 08 de abril de 2010 Espacio&Confort
Cristalizada en un privilegiado lote en esquina del Club de Campo Grand Bell, esta casa, resiste el análisis de exigentes, ya que, desde sus inicios ha sido pensada para el diseño, el confort y privacidad. El proyecto, autoría del arquitecto Fernando Vigil y su avezado equipo de trabajo, resuelve el encargo, a partir de un fuerte planteamiento conceptual que organiza el programa, en tres cuerpos en perfecto diálogo por contraste cromático y formal. Dos volúmenes que se articulan tridimensionalmente entre si a 90 grados y un bloque vertical monolítico e indivisible. La imagen final: una arquitectura de interesante síntesis compositiva que se plasma a través de un todo equilibrado de plantas y alzados rígidamente ortogonales. El acceso vehicular, cuenta con un portón corredizo automatizado, revestido con iguales características que los muros del frente. Un sector que se integra armoniosamente a la vista principal de la casa.
Contenida en sus dos frentes por una añosa arboleda, esta casa, deja ver entre sus troncos, su imponente volumetría de fachada cerrada hacia la calle, preservando la intimidad y, totalmente abierta en su contrafrente, donde espacios amplios e integrados, permiten la vida de sus moradores en función a un exterior impactante.
El trazado de la planta, de esquema en “L”, se organizó por medio de dos amplios y luminosos niveles, distribuyendo en el piso superior, las áreas más privadas – dormitorios cálidos y austeros, con una vista panorámica inmejorable y, en planta baja, los sectores públicos – living, comedor y cocina comedor.
La terraza, hacia la cual se abre el dormitorio principal y, además, se le puede acceder desde el parque, fue pensada como un lugar de puro relax. Un ámbito abierto a la naturaleza, ideal para dejarse llevar por la belleza de ésta o compartir un rato más que ameno con amigos.
La piscina, contenida por una colorida caja paisajística que ofrece diversos rincones para explorar y disfrutar, es el punto externo de equilibrio de la casa. Inteligentemente localizada, capitaliza con su trazo, la intensión de anular los límites que propone toda propiedad. Aquí, son protagonistas, las líneas simples, las dimensiones amplias y la pulcritud de diseño.
Uno de los mayores capitales de esta vivienda, son sus generosas aberturas. Planos fijos y ventanales, que permiten que la belleza del paisaje circundante se fusione con sus interiores.
Adentro, la ambientación refleja rigurosamente el alma de sus propietarios: nada de estridencia, nada de ostentación. La espacialidad y luminosidad del estar, invita a improvisar diferentes reuniones, disfrutando de una buena película, un rato de descanso y lectura o un copetín antes de pasar al comedor. La caja es blanca con elocuencia. No solo las paredes y techos transmiten claridad, sino que, además, casi la totalidad del mobiliario, mantiene ese registro. Sólo son suficientes unos pocos detalles de buen gusto para imprimir un delicado touch de color.
La cocina-comedor, con equipamiento de última generación, no se aparta del estilo de toda la vivienda: blanco para el tono principal, al que se le suma el colorido de los alimentos que se suceden a diario, componiendo una impecable sinfonía cromática. Un área muy luminosa y funcional, que tiene la posibilidad de integrase tanto al sector del comedor principal como al área de la parrilla, donde ocasionalmente se utiliza como cochera. Las interesantes dimensiones del dormitorio en suite, con un hidromasaje in-out, no impiden que una precisa combinación entre muebles contemporáneos y la composición estética diera pie a una cálida intimidad reconfortante. Las acertadas intervenciones y su propio encanto hacen de esta residencia un refugio especial. Una casa que tiene, discreción, geometría, elegancia contemporánea y pura calma.
Texto: Dis. Int. Ana Thorschmidt
Fotos: Leandro Arévalo
[ PROYECTO ]
Arquitecto Fernando Vigil
Asesor de diseño: Arq. Juan Vesprini
Asist. de estudio: Arq. Javier Sosa
Asist. de diseño y ambientación: Victoria Pollini
Colaboración especial : Pablo Nicolicchia
Tel: 221.15.420.5002
[email protected]
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