Armonía y sensibilidad

Diseñada para acompañar la belleza del entorno natural de Pinamar, esta casa, se hace presente, a través de una apuesta vanguardista, de clara lectura racionalista.
El concepto de este proyecto, a cargo del estudio de arquitectura Masia La Rosa fue, ante todo, pensar en la funcionalidad y la racionalidad como estructura. Conceptos claramente desarrollados en la planta y en cada uno de los espacios.
En esta vivienda, se puso a sus habitantes en una relación más intima con la naturaleza, a través de sus diferentes aventanamientos que, desde el interior, nos regalan hermosas imágenes que se trasnforman y evolucionan con cada epóca del año.
La lúdica disposición de sus volúmenes y sus creativas caladuras, se transforman, en grandes captadores de luz solar que se acumula durante el día, para generar temperaturas más que confortables y un importante ahorro de iluminación artificial hasta la llegada de la noche.

Habitar esta casa, de forma distendida y serena, se produce, no sólo recorriendo el paraje que la acoge calidamente sino, también, a través de los diferentes espacios que configuran su arquitectura. Una vivienda que se desarrolla a lo largo de una planta longitudinal, contando con un amplio segundo nivel. Un espacio luminoso y flexible que puede ser utilizado como dormitorio, estudio o sala de juego.
Su diáfano hall de ingreso, conjuntamente con la escalera, articula fluidamente las áreas sociales: cocina-comedor con barra desayunador, estar y galería y, las privadas, dos dormitorios, cuartos de baño y un dormitorio en suite con vestidor.
En esta residencia se aplicaron nociones de espacio fluido que buscan romper con la formalidad. No se concibieron las habitaciones como cajas: simplemente, se las estableció como espacios conformados por fragmentos de una vivienda larga y lineal, planteando una circulación abierta que vincula estos recintos, para constituirse, en el día, más que una suma de individualidades, en una suma de confortables estancias complementarias entre sí, dando una forma de habitar lejana a la ciudad y más cercana al juego y al merecido descanso.
El no perder de vista que se trataba de una casa en un paraje con perfume marino, fue un objetivo conciente, tanto en la planificación de su diseño arquitectónico como en la etapa de su diseño interior.
Más allá de las premisas iniciales, la sensibilidad estética de sus moradores, fue descubriendo otras leyes, como, por ejemplo, que el entorno de añejos pinos, tiene una presencia tan protagónica que, de alguna manera, repele ornatos y cualquier tentativa fastuosa en sus interiores, logrando una ambientación muy “decontracté”, de puro clima marino y cero ostentación.

Su soberbia unidad espacial, ofrece, a través de su luminoso interior, un ámbito de controlado juego entre formas geométricas y tonos muy equilibrados. Un halo de serenidad recorre sus interiores, de impactante simpleza formal y estética. Ambientes diáfanos, íntimos y acogedores, donde se supo mirar con ojo atento la riqueza de los tonos del paisaje circundante, para crear una paleta armónica en la ambientación de cada una de las áreas.
La gama de los ocres, blancos y arenas, envuelven los espacios, conformamdo una caja neutra que genera un marco contrastante con los colores agrestes del entorno natural.
En la cocina impera la sencillez y el buen gusto, y se integra al comedor sin formalismos innecesarios, por medio de una barra con taburetes, de estilizado diseño, que permite la continuidad visual entre los sectores sociales y el exterior.
A continuación, se hace presente el estar, en una ubicación inmejorable. Una estancia que despliega su encanto por medio de su mobiliario muy actual, objetos de la vida cotidiana y detalles de moderno confort.
Definitivamente, un refugio ideal para disfrutar del sol, como guarnecerse de él, recibir amigos y relajarse para contemplar, desde cualquier rincón, la belleza del entorno natural y el cielo azul de Pinamar.~

La aislación del sistema Retak

En comparación, un muro realizado con ladrillos HCCA Retak de 15 cm de espesor ofrece más de un 60% de aislación térmica que un muro de 30 cm realizado con ladrillo hueco de 12 + cámara de aire + ladrillo común. Cómo se logra esto?
Durante la elaboración del ladrillo Retak, en el proceso de la mezcla de los materiales (arena, yeso, cal, etc.) se le agrega polvo de aluminio que actúa como agente espumante. Al momento de ser vertida esta mezcla en grandes moldes, comienza la reacción del aluminio con el agua, produciendo la liberación de hidrógeno, responsable de la formación de poros en el seno de la masa. Estas millones de microburbujas de aire no conectadas entre sí actúan como eficientes cámaras de aire que permiten una excelente aislación, tanto térmica como acústica.~

+ info: Serymat | www.serymat.com

Texto: Dis. de Interiores Ana Thorschmidt
Fotos: Diego Medina y Arq. Heber Guruciaga
Modelo: Tamara Destefano

[ PROYECTO ]
Arq. Matías J. Toso
del Estudio de Arquitectura Masía| La Rosa
Martin Rodríguez Nº 1290 . Mar del Plata
Tel. (0223) 155455722
www.masialarosa.com.ar
Colaboradores:
Arq. Diego Iparraguirre, Diego Alvares
Construcción: Toso Construcciones
3 Carabelas 940. Mar del Plata
Tel. (0223) 155455722 - (02267)15402385