Arquitectura Espacio&Confort 08 de agosto de 2012

The Shard

Diseñado por el prestigioso arquitecto Renzo Piano, The Shard define elnuevo skyline de Londres, convirtiéndose en el rascacielos más alto de EuropaOccidental.


Hace tres años, a orillas del Río Támesis, comenzó a erigirse un edificio con forma de pirámide. Hoy, esa obra descomunal de casi 310 metros nombrada The Shard, inaugurada en el marco de los Juegos Olímpicos, corona el cielo de la ciudad de Londres, transformando el skyline de la ciudad.
Ubicado en London Bridge Quarter, en el distrito de Southwark en Londres (cerca de London Bridge Station, una de las estaciones más concurridas de la ciudad), este nuevo símbolo de la capital inglesa forma parte de un proyecto de renovación urbana, y será el rascacielos más alto de Europa hasta la inauguración del Mercury City Tower de Moscú, que medirá 332 metros.
“The Shard” fue diseñado en 2009 por el reconocido arquitecto italiano Renzo Piano. Esta gigantesca torre de cristal con forma de pirámide y que toma su nombre de la cúpula que parece una astilla, también es conocido como The Shard London Bridge, London Bridge Tower, Shard of Glass, 32 London Bridge. La forma de la torre fue determinada por su prominencia en el skyline de Londres, y a diferencia de otras ciudades como Nueva York o Hong Kong, The Shard no es parte de un grupo existente de edificios de gran altura, sino que se destaca en un barrio londinense con construcciones antiguas como la Catedral de San Pablo.


Se trata de un edificio de 306 metros, 72 pisos, 44 ascensores, y 11.000 paneles de cristal que recubren el exterior. Totalmente revestido en vidrio, y realizado además con granito y acero, el edificio fue diseñado con una forma de triángulo irregular que se mantiene desde la base hasta la parte superior, reduciendo continuamente su superficie.  La idea según Piano es el cambio de las funciones del edificio en las diferentes alturas. Así, la forma piramidal se adapta a la variedad de usos propuestos que propone The Shard: las placas de piso grande para oficinas en la parte inferior, áreas públicas y un hotel en los medios, apartamentos en la parte superior. Cuánto más arriba, menos espacio físico se precisa, porque al llegar a la parte superior, el objetivo del arquitecto era simplemente que el edificio se fundiera en el cielo, “que respirara en las nubes”.
Conceptualmente, Renzo Piano define The Shard como la primera ciudad vertical de Londres, cumpliendo su sueño como autor de un edificio que opere como un “pequeño pueblo”. De este modo, este edificio de uso mixto cuenta con viviendas de lujo, un hotel cinco estrellas de 200 habitaciones, oficinas y restaurantes, una gran variedad de espacios públicos, y en 2013 se completará con una plataforma panorámica que ofrecerá las mejores vistas de Londres (una plataforma de observación en el último piso con una vista de 360º de toda la ciudad).  “Será un lugar lleno de vida que no quedará muerto a las seis de la tarde, como ocurre con los grandes bloques de oficinas”, explica el arquitecto en relación a su obra recientemente inaugurada. Así, los múltiples usos le aportan vitalidad al edificio, y por eso el acceso público fue una de las consideraciones fundamentales del arquitecto.
En lo que refiere a su estructura, The Shard se compone de un núcleo central de de hormigón armado que alberga los núcleos de comunicación vertical junto con el paso de instalaciones, y alrededor del cual se monta la estructura de perfiles metálicos compuestos. Además, gracias a los pliegues de la fachada, que parece “inacabada”,  se crea un efecto de desmaterialización a medida que se asciende en la altura.
Su forma y apariencia, tanto como su función, lo distinguen de todos los edificios altos a través del río Támesis, sobre todo porque su íntegro revestimiento de cristal refleja el cielo y los edificios circundantes. Siguiendo este concepto, el diseño para el interior del edificio atendió a diferentes usuarios, preparando casa espacio según su uso, logrando versatilidad y especificación.
Por último, cabe destacar que durante la construcción se establecieron objetivos estrictos para minimizar el impacto sobre el medio ambiente y maximizar la eficiencia energética.
Polémico y descomunal, The Shard London Bridge fue inaugurado el pasado 5 de julio con los ojos de todo el mundo sobre él. Su creador lo describió como un ‘un velero que surca el río’, aunque hay quienes sostienen que no encaja con la imagen de Londres. Pese a los debates en torno a su construcción, y las controvertidas declaraciones del Príncipe Carlos (entre otros que rechazaron el edificio) que lo comparó con un salero gigante, muchos lo han considerado como una obra maestra del diseño.
Pese a las críticas y a los halagos, The Shard ya se luce en el skyline. Y aunque “los nuevos edificios siempre tienen dificultades para ser aceptados”, explica Piano, no caben dudas de que “la astilla” del cielo londinense se convertirá rápidamente en un referente visual e icónico de la capital inglesa.


 


Fuente: www. the-shard.com
Fotos: Sellar


[ INFORMACIÓN ]
Tipo de proyecto: Uso mixto. Oficinas,
residencial y hotel.
Ubicación: Londres. Inglaterra.
Fecha de construcción: 2009 - 2012
Altura: 310 m


[ PROYECTO ]
Arquitecto Renzo Piano
www.rpbw.com
Ingeniero structural:  Turner & Townsend, WSP Cantor Seinuk, Robert Bird Group e Ischebeck Titan

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