Refugios Extremos

desafíos inimaginables en el camino.
Todas las semanas, se reúnen con un nuevo cliente que posee un terreno en tierras silvestres que sueña con construir un refugio. Los protagonistas proporcionan grandes ideas y el paso a paso de la construcción. Para mantener controlados los costos, el clientes debe proporcionar los materiales, fuerza de trabajo compuesta por amigos y familia y estar de acuerdo en realizar todo el trabajo en una semana. Pero antes de que estas estructuras cobren vida, en terrenos hostiles y generalmente a kilómetros de la ruta más cercana, Paul y Tuffy deben buscar la manera de transportar los materiales. En caso de que no existan rutas, ellos deben construir su propio camino.

Algunas de las construcciones incluyen una cabaña sobre un árbol de doble uso: tiene que servir como guarida de hombres y como refugio de luna de miel, de modo de poder organizar allí su despedida de soltero y luego disfrutar la cabaña con su encantadora esposa. Para ello se utilizan doce enormes postes de teléfono como gigantescos zancos para elevarla entre los árboles. Dentro de la cabaña, Paulie convierte la antigua mesa de metegol de John en una mesa de comedor multifuncional. Tuffy toma una vieja aerosilla de esquí y mágicamente la convierte en una parrilla ascensor que se puede usar tanto en el deck de la cabaña como abajo en el suelo. Pero lo más difícil será convertir una vieja y destartalada caravana en una guarida elevada para los amigos de John. Es una tarea nunca hecha después de la otra en este episodio, cuando Paulie y Tuffy se esfuerzan por construir una cabaña a cuatro metros y medio del suelo, encaramada en la copa de un árbol en un accidentado terreno forestal.
También trabajan con clientes que desean una cabaña hecha casi completamente de piedra. Danielle es dueña de unas tierras en Dorset (Vermont) en las que hay una cantera de mármol que fue abandonada unos cien años atrás. En la cantera, todavía quedan unas cuantas losas de mármol cortadas, algunas de hasta siete toneladas de peso. Danielle tiene la esperanza de poder utilizar estas losas para construir un santuario de piedra que parezca tener siglos de antigüedad. Esta será una prueba de fuego para los constructores de cabañas, ya que colocar una de estas losas un par de centímetros fuera de lugar podría comprometer toda la construcción. La cabaña terminada será usada como refugio por Danielle y sus amigos de la ciudad. Como Danielle quiere que sus amigos hagan música y compartan asados en la cabaña, Paulie y Tuffy tienen que construir también un anfiteatro en la colina que dé al lado con asientos hechos con miles de kilos de roca. Y este no es el final de este show rocoso; antes de terminar, los reyes de las cabañas también deberán construir un sofá giratorio de piedra y una mesa de exteriores hecha con una losa de mármol.
En Grafton (Nueva York) en la propiedad de vacaciones de la familia Kiely, Tommy Kiely y su hijo, Thomas, son la cuarta y la quinta generación de la familia en hacer uso de estas tierras, que incluyen una gran laguna. Estos autodefinidos fanáticos de la pesca quieren una cabaña flotante que pueda usarse para pescar en clima cálido y que sirva como un tibio refugio para la pesca en hielo durante el invierno. Paulie y Tuffy deben construirles un santuario flotante de pesca que se desplace por la laguna, que sea capaz de sobrevivir los crudos inviernos de Nueva York y que se pueda sacar del lago para guardar. Como la cabaña final es demasiado grande para desplazarla con la excavadora de Tuffy, debe ser construida en dos partes que luego se unirán en el agua. Esta combinación de crear una cabaña en dos partes para las cuatro estaciones que no solamente flote sino que pueda desplazarse por la laguna llevará a los reyes de las cabañas a nuevos extremos de la ingeniería y el diseño.