Casas Espacio&Confort 02 de octubre de 2020

Blanco andaluz

Marbella. Una casa de los ’60 intervenida por Alejandro Giménez Architectsinspirada en los pueblos blancos de Andalucía.


Esta vivienda es un oasis de placer, un trocito de paraíso dentro de la vorágine inmobiliaria que se ha desarrollado en Marbella en los últimos años, según relata el Arq. Alejandro Giménez.
Una casa con valor familiar, habitada primero por sus padres que se dejaron seducir por la Marbella glamorosa de los años 60 y disfrutada ahora por sus hijos como casa de vacaciones.
“En mi trabajo trato de introducir a la arquitectura poco a poco, buscando que no se vea de un vistazo. Espacios que van conduciendo y seduciendo de un patio a otro, con el sonido de sus fuentes que llaman para que vayamos a descubrirla... o con un vivo color que nos atraiga, todo pasando del interior al exterior sin casi percibirlo.” – comenta el autor.
Y esta línea de pensamiento proyectual se verifica en la obra. Se intentó recrear el placer de perderse, de andar sin un rumbo fijo, algo que podemos sentir recorriendo muchos pueblos blancos de Andalucía que se encuentran a pocos kilómetros de esta vivienda.
A su vez, se buscó hacer una arquitectura contemporánea pero dotándola de calidez y temperatura, huyendo de la frialdad y de la componente aséptica de muchas nuevas casas. Creando espacios que cumplan la misión espiritual de la arquitectura que, con su belleza, transmitan serenidad y sosiego, algo necesario en un mundo contemporáneo en el que prima la velocidad.
El color predominante es el blanco, como referencia a la arquitectura popular de los pueblos blancos de Andalucía, con su riqueza y movimiento de volúmenes. Puntualmente se ha utilizado un rosa similar al de las Santa Rita existentes en la parcela... que toma vida cuando se baña en el sol de Andalucía.













La utilización de materiales se ha reducido al mínimo posible, blancos muros, suelos de piedra caliza y madera de iroko. Se trata de resolver todo con esta paleta sencilla de colores. Habiéndose diseñado algunos muebles a medida para estos espacios.
Emplazada sobre un terreno de uno 12.000 m², cercano al núcleo urbano de Marbella y a unos 100 m. de la playa.
La intervención se hace respetando e integrando la impresionante vegetación existente, compuesta por grandes pinos, cipreses, santa ritas.... la casa se sitúa en lo más alto de una duna existente, adaptándose en distintas plataformas para arraigarse al suelo. Huyendo de transformaciones agresivas del bello paisaje existente.
Tras pasar la puerta de entrada un gran patio de acceso a la vivienda, ordena las relaciones entre la vivienda principal y la casa de los guardas. Esto hace que la vivienda se vaya descubriendo poco a poco, se hace más misteriosa y aparecen muchos recorridos distintos. Este acceso se hace a través de un mar de chinos, que se inunda con una corriente de agua, recordando a la arquitectura japonesa. También lo recuerda el acceso a las habitaciones por el muro rosa, a través de las piedras flotantes.
Cada habitación tiene una relación directa con el su propio espacio exterior, su propia terraza privada desde la que disfrutar de las vistas.
Todo está pensado para disfrutar cada momento y es así que existen varios comedores por la casa. El desayuno que se hace en patio trasero de acceso, junto a la cocina, el comedor de invierno que mira se abre a la fuente del patio y al mandarino. El comedor de la terraza con vistas al jardín, y el comedor de la piscina.
Esta arquitectura sencilla y bella de muros blancos que enmarca y delimita el paisaje, logra sorprender en su recorrido y espacios a sus visitantes, y sobre todo, disfrutar a pleno de ella junto a sus dueños.

PROYECTO
Alejandro Giménez Architects
www.alejandrogimenez.net
Colaboradores: Claudia P. (DECORACION), Juan Antonio Pino Limón (arquitecto), Delia Garcia (Arquitecto)

INFORMACIÓN
Ubicación: Marbella (Málaga)
Superf. parcela: 12.000 m2
Superf. vivienda existente: 447.67 m2
Superf. ampliación vivienda: 116.76 m2
Año de la ampliación: 2011

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