Casas Espacio&Confort 14 de octubre de 2011

Un faro en el bosque

**una residencia de veraneo, no muy lejos del mar, plagada de cuidadosdetalles, confabulados todos para un pleno disfrute de quienes lahabiten.


Rodeada de añejos pinos marinos, este refugio de imperdibles estadías en cualquier época del año se cristaliza en la zona norte de Pinamar, paraje de encantadora belleza.
Este proyecto, composición armónica entre la belleza del paisaje y la creatividad profesional del estudio de arquitectura Distéfano-Rodríguez, se basó en la búsqueda de un hábitat de encuentro que seduzca a permanecer y no dejar de gozar ni un instante la belleza del paraje que lo acoge.
Esta obra, un solar de distención con estética depurada, se funde con gran empatía con su entorno natural a través de un juego sereno pero a su vez inquieto de llenos y vacíos. Cuerpos opacos que generan un interesante movimiento espacial con imprevistas rupturas. Planos calados de impecable transparencia que provocan que el afuera se fusione sin miramientos con el adentro.


Tras ingresar a la casa, nos recibe un hall de acceso, liviano y luminoso, desde donde se pueden vislumbrar, sutilmente, distintos recortes de las áreas que conforman la planta baja.
En el ala izquierda de la misma, se dispuso un toilette y el dormitorio principal en suite. Una estancia de pura intimidad y sosiego que capitaliza, a través de su ventanal en ángulo, toda la luz del sol naciente.
Avanzando hacia el centro de la planta, una figura plástica, calada e iluminada escenográficamente, nos deja entrever el ágora de la familia: el estar – comedor y la cocina abierta. Una fluida secuencia de espacios integrados, esencia de este proyecto, de generosas dimensiones y desbordantes de luz natural, donde lo cotidiano fluye armoniosamente en contacto permanente con la naturaleza.
A continuación del comedor, epicentro de nutridas y amenas conversaciones, le sucede un área semicubierta – quincho. Un sector muy chill-out, que refuerza el vínculo indisoluble de la vivienda con el entorno natural.
El nivel superior, además de tres luminosos dormitorios con cuarto de baño tripartito cada uno, cuenta con una extensa terraza-solárium. Un ámbito abierto al aire libre, verdadera delicia para reposar indefinidamente bajo el cielo azul estival.
La belleza indescriptible que aporta el afuera, se traduce en colores limpios y claros en el interior de la casa, generando un clima muy receptivo que embebe cálidamente cada una de las áreas.
Dejándose llevar por una burbujeante acuarela de verdes, un entorno natural que capta todas las miradas desde su interior, el estar invita a sentarse y disfrutar de incontables momentos en familia o con amigos.
La cocina tampoco escatima visuales hacia el exterior. Luminosa, muy contemporánea y funcional, se articula con las estancias más vividas y compartidas de la casa a través de una isla lateral de doble función: un plano de trabajo y de cocción por un lado y por el otro, un tentador desayunador.
Al caer el sol, un juego mágico de luces se enciende, encantando el paraje que contiene a esta residencia, ofreciendo de esta manera, una sintonía de miradas curiosas que exhibe su mejor resultado.~


Texto: Dis. de Interiores Ana Thorschmidt
Fotos: Diego Medina


PROYECTO
Arq. Martín Distéfano
Arq. Griselda Rodríguez

Av. Bunge 1453. Pinamar
(02254) 492 646
www.drarq.com.ar
info@drarq.com.ar


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